Miércoles, 15 de mayo: visita al HTX-Gymnasium

La planificación del día era la siguiente:

09:00-12:00
HTX-Gymnasium (Educación Secundaria Superior) Branding of a Technical High School in Denmark and innovation in education

12:00-13:00
Lunch

Esta visita estaba pensada para ver un ejemplo de marketing de marca (branding) aplicado a un centro de secundaria, y para conocer su manera de integrar  la innovación en la formación de los alumnos de secundaria.

Al llegar al Odense Tekniske Gymnasium (OTG) nos encontramos con mucha animación. Estaban celebrando una feria en la que los alumnos vendían los productos que ellos mismos habían diseñado y fabricado.

Enseguida nos pusieron en contacto con nuestro anfitrión de la mañana, Johnny Gruballe Nielsen, el director del centro.
Johnny nos explicó brevemente la estructura del sistema educativo danés en los tres cursos de la etapa de bachillerato (15 a 18 años).

Los estudios que ellos imparten son técnicos y se ubican en  el llamado bachilerato HTX. El sistema educativo danés es realmente flexible. Hay materias obligatorias y voluntarias. De estas últimas, unas 50.

En cuanto al nivel de profundización en las distintas asignaturas, se mide con las letras A, B y C, siendo A el nivel más exigente de los tres.

Las asignaturas se trabajan tanto desde el punto de vista teórico como práctico. Utilizan proyectos basados en situaciones reales en las que los alumnos trabajan en grupos de 2 o 3, y los profesores se tienen que organizar también en grupos (este curso hay 9 equipos de 8 profesores), ya que los proyectos implican a varias asignaturas.  También consideran que la innovación es una parte fundamental en el proceso formativo, tanto que esta integrada en el currículum. Todos los alumnos y alumnas adquieren un conocimiento mínimo sobre innovación (nivel C) y pueden profundizar en la materia por medio de una asignatura opcional (nivel B). Se centran en la creación de productos y en cómo se podrían comercializar, pero no le dan importancia a que los productos sean realmente vendibles ni a que las empresas sean viables.

Según nos explicaron, dedican en torno a un 1% del presupuesto anual (115.000 €) al fortalecimiento de la marca (branding). El dinero es invertido tanto en medios tradicionales (periódicos, radio y TV) como en redes sociales e Internet en general.
También ponen el foco en cuestiones internas, entre las que destacan las siguientes:

• Trabajar las asignaturas científicas al más alto nivel.
• Disponer de modernos laboratorios y realizar prácticas atractivas.
• Poner en marcha proyectos multidisciplinares de utilidad real.
• Utilización de las tecnologías de la información.
• Disponer de lugares agradables para estudiar, creando una atmósfera de trabajo adecuada.
• Participación en competiciones que premian el talento.

Después nos invitaron a que visitáramos la feria de los alumnos y tuvimos la oportunidad de hablar con varios grupos de alumnos que nos explicaron en qué consistían los productos que habían diseñado y construido utilizando impresoras 3D, cartón y sierras de corte tradicionales y por láser.


A mediodía nos desplazamos hasta otro centro del SDE, el VET, y allí, Lone Olsen, la orientadora del departamento de automoción nos enseñó las instalaciones dedicadas a la formación de tecnologías de la información (IT). También nos explicó que los estudios de FP comienzan con una formación muy básica que tiene una duración de 6 a 8 meses (aunque puede ser mayor en caso de problemas) y que después el alumno tiene que buscarse una empresa para continuar la formación. A partir de ahí, los alumnos pasan períodos de tiempo en la empresa y otros en el centro educativo. Aquellos que no encuentran empresa para poder empezar a trabajar, se quedan descolgados del sistema hasta que logran una empresa. Para evitar esta situación, han recreado la vida laboral en unos espacios a los que llaman workshops y que permiten "sustituir" la experiencia vivida en la empresa y mantener a los alumnos en el sistema.

En el área de IT disponen de "salas libres" con ordenadores, en las que los alumnos trabajan con un profesor de apoyo para resolver dudas.
Nos comentan que existen unas guías generales del Gobierno, pero que son los equipos de docentes los que diseñan cómo van a plantear la formación para que los alumnos alcancen los objetivos.

En la imagen se puede ver una clase en la que entramos:

Los profesores plantean las cuestiones que tienen que trabajar los alumnos y dan acceso al material. A partir de ahí, los alumnos van trabajando los materiales y cuando se encuentran con dificultades, solicitan ayuda a los profesores. En el aula en que estuvimos, había 3 profesores para atender a una docena de alumnos. Cada alumno lleva su propio ritmo, pudiendo llevarles desarrollar el trabajo entre 20 semanas y 1 año y medio (la mayoría lo hace en 30 semanas). Si después de ese tiempo no logran terminar el módulo, tendrían que empezar de nuevo y contarían otra vez con el plazo de año y medio.
También ofrecen formación adicional relacionada que puede ser cursada de forma voluntaria por el alumnado, programación de apps, robótica, etc.
Al final de la formación, se les plantea un proyecto con aspectos relativos a todo el recorrido formativo y se les hace también un examen final global.
Nos pareció muy interesante la forma en que realizaban la evaluación por competencias.

El sistema educativo danés es muy adaptable y permite al alumnado realizar distintos recorridos formativos hasta llegar al nivel más alto de formación.


Ese día se nos hizo tarde para comer, así que fuimos un poco antes a cenar. Nos habían recomendado el Cro'n, un pequeño restaurante de comida típica danesa que se encontraba cerca del hotel, así que allí terminamos la jornada.